La nueva cifra eleva sustancialmente las estimaciones previas de la organización de 11 mil millones de dólares, debido al influjo de donaciones en los últimos meses de campaña, especialmente por la polarización que ha provocado la confirmación de la jueza conservadora del Tribunal Supremo Amy Coney Barrett, contraviniendo la tradición de no abordar este proceso durante la época electoral.
“Incluso en medio de la pandemia, todo el mundo está donando más en 2020, desde personas normales hasta los billonarios que firman cheques de ocho ceros a Super PAC (comités de acción política con normas y límites de fondos distintos a los partidos políticos)”, indicó la organización en un comunicado.
“Hace diez años, hablar de un candidato presidencial con mil millones de dólares era algo difícil de imaginar. Este año probablemente veremos dos”, indicó la directora ejecutiva de Center for Responsive Politics, Sheila Krumholz.
El nuevo monto, equivalente a una quinta parte de todo el presupuesto del Departamento de Educación de Estados Unidos, supera con creces los alrededor 6 mil 600 millones de dólares gastados en la campaña electoral de 2016, en la que se enfrentaron el republicano Donald Trump y la demócrata Hillary Clinton.