En un momento histórico de Tokio 2020, Quinn se convirtió este viernes en el primer deportista abiertamente transgénero y no binario en ganar una medalla olímpica, tras la final ganada por su equipo ante Suecia (3-2 por penales tras 1-1 en el juego), en Yokohama.
Quinn nació en Toronto, Canadá, en 1995. En su infancia participó en equipos de hockey, baloncesto y hasta ski, pero su hermana gemela fue quien le inculcó el amor por el fútbol. Tras lucirse en el equipo de fútbol de la Universidad de Duke en Carolina del Norte, comenzó a jugar en Washington Spirit de la poderosa liga de Estados Unidos.
En su carrera pasó por el París FC de Francia y el Vittsjö GIK de Suecia, y actualmente milita en el OL Reign de la NWSL.
Quinn se convierte así es una referencia a la hora de hablar de Tokio 2020 como los Juegos Olímpicos con mayor diversidad.