De acuerdo con la información, el gobierno abrió licitación en el marco del programa de educación sexual. La educación sexual integral (ESI) en la Argentina es parte de los nuevos programas de formación. Si bien fue aprobada hace tiempo por mayoría en el Congreso nacional, su implementación ha provocado resistencia.
Durante el fin de semana, una noticia en los medios de Argentina encendió la polémica: el Ministerio de Salud del país lanzó una licitación pública para comprar dispensers de condones y 10 mil penes de madera pulida. La polémica, además, se produjo porque el presupuesto es de 13 millones de pesos argentinos, unos 130 mil dólares al cambio oficial.
Así se justificaron:
“Los insumos solicitados permitirán asegurar una amplia disponibilidad de materiales de promoción cuya finalidad sea concientizar y evitar la propagación de enfermedades de transmisión sexual tales como el VIH y otras ITS″, explica el texto de la Secretaría de Acceso a la Salud del gobierno argentino.
Vizzotti, dijo mediante su cuenta de Twitter, que las prácticas sexuales protegidas “previenen infecciones de transmisión sexual como la sífilis y el VIH” y que el objetivo es explicar sobre el uso de preservativos que es una manera de “educar en el cuidado individual y colectivo”.
Gracias por la inesperada difusión de los #PenesDeMadera.
— Carla Vizzotti (@carlavizzotti) July 17, 2021
El debate generado no hace más que visibilizar y confirmar cuánto necesitamos Educación Sexual Integral (ESI) en nuestra sociedad.
