Esta costumbre llegó a México como parte de las tradiciones españolas y representa el encuentro de los tres Reyes Magos – Melchor, Gaspar y Baltasar– con el recién nacido niño Jesús que se llevó a cabo el 6 de enero y que se conoce como el Día de la Epifanía.
Según se cree, la forma circular de la rosca y su decoración representan la corona de los tres Reyes Magos y, en México, dentro de la rosca se guardan pequeños muñecos de plástico que simbolizan a Jesús recién nacido.
A quién parta la rosca de Reyes y se encuentre con el pequeño muñeco tendrá que pagar el 2 de febrero, día de la Candelaria, los tradicionales tamales para todos con los que compartió el pan, pues inmediatamente se convierte en el padrino del bebé.
Recientemente se viralizaron en redes en México las roscas de Reyes con muñecos de series de televisión como los llamados “Baby Yoda” sustituyendo al muñeco del niño Dios, que nada tienen que ver con la religión, ni la costumbre que sustenta la celebración.
Baby Yoda, o Grogu, ha causado conmoción a tal grado que inclusive personas que nunca han visto películas y series relacionadas con Star Wars están familiarizados con él.
Numerosas panaderías de todo el país están preparando la muy habitual Rosca de los Reyes Magos con un detalle que no tiene nada de tradicional. Esto ha provocado polémica, por un lado, fanáticos múltiples de Star Wars y de Baby Yoda en general han externado muestras de simpatía y humor ante el suceso y por el otro, diversas organizaciones religiosas del país han interpretado esto como una afrenta a la fe.