El presidente Hasan Rohani anunció la medida en el consejo de ministros, al tiempo que reiteraba sus críticas a Estados Unidos, Europa, China y Rusia, a los que acusa de ser los responsables del estancamiento actual en torno al acuerdo concluido en Viena en 2015. La medida tiene lugar en medio de las fuertes tensiones entre Washington, que hacen temer un conflicto en la región estratégica del Golfo.
Rohani dijo que su país comenzaría a aplicar la segunda fase de su “plan de reducción” de sus compromisos, reversible en cualquier momento, según Irán, si los otros socios responden a sus demandas.
Teherán “dejará de lado” su compromiso de no enriquecer el uranio por encima de 3.67%, a partir del 7 de julio. “Lo elevaremos por encima del 3.67% tanto como queramos y en la cantidad que lo necesitemos”, declaró Rohani.
También advirtió que a partir del domingo, Irán podría retomar el proyecto del reactor de agua pesada en Arak “que podría producir plutonio”, a menos que “ustedes (los otros países del acuerdo) mantengan todos sus compromisos”.
El lunes, Teherán superó el límite de 300 kilos autorizados para sus reservas de uranio poco enriquecido.
Con información de informador.mx