El pontífice aseguró que "la Santa Sede y toda la Iglesia están trabajando para combatir y prevenir tales crímenes y su ocultamiento, para averiguar la verdad de los hechos que implican a eclesiásticos y para hacer justicia a los niños que han sufrido violencia sexual, agravada por el abuso de poder y de conciencia".
Recordó que el próximo febrero ha convocado en el Vaticano una reunión con los episcopados de todo el mundo para abordar este problema y dijo que el encuentro "pretende cumplir un paso más en el camino de la Iglesia para arrojar luz sobre los hechos y aliviar las heridas causadas por esos delitos".
El papa criticó también la violencia contra las mujeres que se ejerce en las sociedades.
Sin embargo, mostró su reticencia a lo que calificó de "la promoción de algunas formas de indiferenciación", pues "corre el riesgo de desnaturalizar el ser hombre o mujer".
En el terreno de los derechos, Francisco denunció también "otra plaga de nuestro tiempo, las condiciones de los trabajadores", y citó la pérdida de puestos de trabajo, la perdida de garantías sociales y económicas o las condiciones de esclavitud moderna, así como el trabajo infantil.
Con información de noticieros.televisa.com