Después de una reunión en la Fiscalía Especializada en Feminicidios, Gerardo Martínez expuso que la autoridad le explicó que no se detectaron huellas dactilares, pruebas de saliva o la letra de Yolanda en el vaso hallado junto a su cuerpo, en un baldío del Municipio de Juárez, que era una de las pruebas que fortalecía la hipótesis de un posible suicidio.

“No estoy conforme, por eso voy a solicitar que la Fiscalía General de la República que atraiga el caso (…) ellos están de acuerdo, me dieron los puntos a seguir y es por medio de los abogados que se haga”, declaró a los medios de comunicación después de salir de la reunión.

Tras señalar que van poco más de tres meses de retraso en los resultados de la Fiscalía General de Justicia de Nuevo León y las autoridades federales de la Fiscalía, Martínez dijo que incluso por buscar justicia ha perdido su trabajo y ha sobrevivido con empleos eventuales.

“Yo soy un ciudadano esperando a que la Fiscalía resuelva porque para eso están ellos ahí, y si no saben y no resuelven pues qué están haciendo ahí que renuncien y que dejen a personas que sean más capaces de resolver estos casos”, manifestó.

“Hasta tuve que perder mi trabajo para exigir la justicia estar buscando la verdad y de alguna manera he logrado algo porque ya se cambió a feminicidio cuando la Fiscalía lo estaba manejando como suicidio desde siempre para darme carpetazo”.

“Ahorita estoy desempleado, pero de alguna manera yo sé sobrevivir porque trabajo de muchas cosas, hago cualquier trabajito para solventar mis semanas. De albañilería, de pintura, de jardinería, nunca había parado, pero desde l 31 de marzo para acá estoy desempleado, debería estar trabajando, pero a mi hija la mataron y debo estar exigiendo que me hayan arrancado a mi hija”, declaró.