Hace más de 18 meses que se cerraron las fronteras terrestres entre México y Estados Unidos para evitar la propagación y contagios de COVID19; hoy se reabre para la reactivación económica.
La reapertura va con la condición de comprobar el esquema completo de vacunación contra COVID19 de los turistas .
Se prevé sin duda la reactivación del intercambio económico pero también el caos vehicular por la gran movilidad de hoy.
Desde ayer, en ciudades como Nogales y Reynosa se observó un aumento considerable de los patrullajes para la seguridad de quienes buscan cruzar la frontera, así como largas filas de vehículos, con esperas de hasta dos horas, para pasar la frontera.
La primera garita en que se esperaba la reapertura es la de San Ysidro, en el estado de California, por aquí cruzan en promedio 35 mil personas al día. Se estima que se perdieron 7 millones de dólares semanales por el cierre de San Ysidro, Imperial Beach y San Diego.
De acuerdo con el Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios de la UNAM, la derrama económica derivada de los cruces entre México y Estados Unidos ascendía ante de la pandemia a 900 millones de dólares por semana: 600 millones que iban de México hacia Estados Unidos y 300 millones del norte al sur.
