La portavoz de la Cancillería china, Zhao Lijuan, asegura que el agua que planean verter al mar, no es lo suficientemente segura. Recordó que el océano Pacífico "no es el bote de basura de Japón" ni "tampoco una cloaca".
Lijian afirmó en un tuit que el océano Pacífico "no es el bote de basura de Japón" ni "tampoco una cloaca".
"No deben esperar que el mundo pague la factura por el tratamiento de sus aguas residuales. Un funcionario japonés dijo que el agua está 'bien para beber', ¿por qué no toma él un sorbo primero? No deberían fingir ser ignorantes", escribió.
Por su parte, el vocero chino señaló que la decisión de verter el agua fue respaldada por Estados Unidos, a lo que respondió:
"Si Estados Unidos valora la protección del medio ambiente, debería asumir su responsabilidad en lugar de adoptar un doble rasero", agregó.