Tuvieron que pasar 33 años para que Napoli volviera a ser Campeón de Italia. Los Azzurri empataron 1-1 con Udinese jugando como visitantes y con eso se consagraron con el campeonato de la Serie A faltando cinco jornadas que culmine la temporada.
Hirving Lozano se podrá presumir como el primer jugador tricolor, de la historia, en ganar el Scudetto en una Liga que históricamente siempre se le complicó a sus compatriotas.
Ni Pedro Pineda, Miguel Layún, Rafael Márquez, Carlos Salcedo, Héctor Moreno, Johan Vásquez, y tampoco Guillermo Ochoa, es el “Chucky” quien entró a los libros dorados del futbol italiano gracias a un título histórico para el club.
El mexicano fue convocado al partido, salió a la banca y entró al minuto 86 en lugar de Khvicha Kvaratskhelia.
La escuadra visitante sufrió con el gol tempranero de Sandi Lovric para adelantar al Udinese al minuto 13, pero un riflazo con todo el rencor de Victor Osimhen significó el deseado empate al 52′, ese que supo pura gloria para los napolitanos.