El futbolista colombiano James Rodríguez fue catalogado por la prensa deportiva internacional como un "héroe", porque gracias a su rápido accionar se pudo salvar la vida de un jugador del equipo rival que había colapsado en pleno partido.
El futbolista maliense Ousmane Coulibaly, del equipo visitante, se desplomó, empezando a convulsionar. James Rodríguez acudió a socorrerlo y le acomodó la cabeza de tal forma que pudiera respirar y no se ahogara, debido a que Coulibaly había quedado boca arriba.
Después arribaron los médicos y lo trasladaron a un hospital, donde se está recuperando. BeIN Sports informó que Coulibaly sufrió un paro cardíaco, mientras que el médico del club Al-Wakrah destacó que el actuar del colombiano fue vital para salvar la vida de Ousmane.