En un comunicado fechado en Montevideo el 3 de enero, los integrantes del colectivo calificaron lo sucedido con el delantero del Manchester United como un “acto discriminatorio contra la cultura y forma de vida de los uruguayos”.
“La sanción revela una visión sesgada, dogmática y etnocentrista que no admite más que la lectura que se quiere imponer desde su particular y excluyente interpretación subjetiva, por más equivocada que sea”, continuó el texto.
Los futbolistas uruguayos defienden que su compatriota “no ha cometido nunca un solo acto que pueda ser interpretado como racista” y que su comentario “gracias, negrito” -publicado en Instagram- es “una expresión habitual” en el país suramericano “para referirse cariñosamente a un ser querido, a un estimado amigo”.
El texto, que pidió la suspensión de la sanción impuesta a Cavani y la restauración de “su buen nombre y su honor, injustamente mancillado”, acusó a la FA de “una total ignorancia y desprecio por una visión multicultural del mundo, respetuosa con la pluralidad” y de equivocarse “desde la aplicación unilateral y rígida de sus reglas antirracistas” que, en este caso, “no son aplicables”.
Cavani, que deberá asistir a sesiones de “educación presencial”, escribió el 29 de noviembre, poco después de una remontada ante el Southampton, “gracias, negrito” en respuesta a un seguidor que lo felicitó.
COMUNICADO OFICIAL pic.twitter.com/WzLkG6nlSf
— Diego Godín (@diegogodin) January 4, 2021