El sufrimiento y abuso que sufren los animales domésticos a manos de quienes se supone deberían protegerlos, es dramático. La falta de responsabilidad y recursos de las instituciones encargadas de atender las denuncias de maltrato a llevado a la ciudadanía a denunciarlo en redes, con la esperanza de que sea la presión social lo que obligue al maltratador a detenerse o a entregar al animal al propio denunciante, cuando esto debería ser resuelto por la autoridad.
Cancún se encuentra en un enorme rezago en materia de atención a la denuncia por maltratoanimal. Las autoridades siguen siendo omisas a resolver los casos, que suman decenas. La desesperación de la gente que no encuentra en estas instancias, el mínimo interés por ayudar a los animales, que presos en las casas o muriendo en las calles, aunque tengan dueño, ha provocado un enorme malestar entre los futuros votantes, a propósito de las próximas elecciones en nuestro estado.
La deportista Aline González, que se ha destacado en el boxeo de Quintana Roo, es una ciudadana preocupada por los “callejeritos” como cariñosamente les llama, ha rescatado a muchos de las calles de Cancún,concretamente de El Pedregal, una de las zonas con más incidencia de violencia contra animales, ha denunciado muchas veces a maltratadores que siendo propietarios de animales, los dejan morir en la calle, cuenta con videos para respaldar y brindar pruebas irrefutables a la Dirección de Protección y Bienestar Animal de Cancún, sin que esta haya atendido una sola de sus denuncias presentadas. Desde el perro confinado a una azotea, amarrado en un patio, sufriendo hambre, sed, suciedad, golpes y acumulamiento, hasta la perra esclavizada y obligada a parir en infames condiciones, todo debe ser investigado y debe sancionarse a los responsables, esto además de mostrar la firmeza de una administración, sería una excelente recaudación.
Como es costumbre de nuestras administraciones municipales, deberá ocurrir una tragedia, en donde se vean involucrados denunciantes y denunciados para ver si entonces hacen su trabajo. Como Aline, mujeres y hombres se enfrentan cara cara y a diario con el peor lado del ser humano. Sin ninguna recompensa más que salvar a un indefenso animal del martirio.
Insistiremos desde este espacio en la urgencia de atender las denuncias por maltrato animal que los cancunenses presentan a diario en la instancia encargada de atenderlo. No apelaremos a su ética laboral porque en más de una ocasión, hemos sido testigos de la carencia de esta, pero la Dirección de Protección y Bienestar Animal está obligada a atender las denuncias ciudadanas, porque son la instancia facultada para esto, porque son servidores públicos y porque para esto se le paga.